A muchos nos gusta estar sentados en un jardín disfrutando de un helado refresco, pero es muy triste cuando llega el momento de despedirse del lugar, al parecer el frío sofoca el cuerpo o el sol mismo comienza a calentar un poco el ambiente. Además, los exteriores no nos brindan la facilidad que se puede encontrar en los interiores, por lo que el momento en el jardín y lugares llenos de árboles y plantitas hermosas se vuelve una cuestión de minutos o horas, a lo mucho podemos disfrutar de un fin de semana completo, pero la depresión regresa a nuestras mentes en el momento en que sabemos que tenemos que retornar a nuestro habitual de estilo de vida.
Tenemos que tomar en cuenta que nosotros somos seres naturales que necesitan del oxígeno y sitios despejados para expandir nuestros pensamientos – el encierro detrás de cuatro paredes no es saludable para ningún cuerpo por lo que el día de hoy vamos a mostrar una serie de ejemplos que nos muestran cómo se han utilizado los exteriores para complementar el ambiente que se vive en los interiores con la característica especial que no estás en el exterior sino en el interior de tu propia casa, lo que resulta fabuloso ya que puedes estar observando lo que ocurre en el exterior mientras disfrutas de un chocolate caliente a la luz de la chimenea en horas del atardecer.
Decorar de esta manera tiene muchas ventajas – entre éstas podemos citar que la belleza de los objetos naturales es original y no creada artificialmente, los colores son más vibrantes al absorber la luz de una manera más equilibrada.
LLevar la naturaleza a los interiores no siempre es buena idea pero si lo haces con plantas artificiales puede llegar a ser muy bonito.
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