Una cafetería puede estar abierta todo el día – desde la hora del desayuno hasta finales del día, después de una ajetreada labor. A cualquier hora es el lugar donde las personas se relajan y además de descansar también comen – es por estas razones que las cafeterías deben de estar pensadas hacia el consumidor final.
Al momento de decorar la cafetería lo primero es saber que ya que es un lugar en donde se sirven alimentos, todo debe de estar perfectamente limpio: paredes, cocinas, platos, deben de estar siempre limpios. Lo segundo es tratar de amenizar el lugar de manera de hacerlo familiar – la mayoría de cafeterías optan por colocar un televisor para el entretenimiento del cliente lo que convierte a la cafetería en un espacio totalmente diferente con capacidades de entretenimiento.
En una cafetería la situación es más funcional que visual.
Nuestro consejo es que se preocupe más por la limpieza que por cualquier otra cosa, recuerde que en una cafetería sucia nadie va a comer.
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